“Si nuestras infraestructuras son atacadas, el propio enemigo sionista sabe cuáles son las acciones que podemos tomar en respuesta”, ha advertido este martes el jefe de la Diplomacia persa durante una rueda de prensa en Kuwait, en respuesta a una pregunta sobre cómo reaccionaría Teherán a una eventual agresión israelí al territorio iraní.
El régimen de Israel ha prometido responder al ataque masivo de misiles que lanzó Irán el 1 de octubre contra tres bases militares israelíes. Algunos funcionarios del régimen sionista han pedido apuntar contra las instalaciones de energía nuclear, los campos petrolíferos y otras infraestructuras científicas y económicas de Irán.
Araqchi ha defendido la operación iraní del 1 de octubre bautizada como “Verdadera promesa II”, diciendo que fue “un acto defensivo y una respuesta a los ataques” de Israel.
Atacar instalaciones nucleares es un grave crimen internacional
Sobre una eventual estupidez israelí de apuntar a las centrales nucleares de Irán, Araqchi ha alertado que “el ataque a las instalaciones nucleares es un grave crimen internacional, e incluso amenazar con atacarlas también es un delito y una violación del derecho internacional”.
El jefe de la Diplomacia persa que se encuentra en Kuwai, como parte de una gira regional, ha señalado que todos los vecinos de Irán han expresado su fuerte oposición a cualquier agresión israelí al territorio iraní, ya sean las instalaciones nucleares o no nucleares.
Araqchi ha señalado que “Israel no respeta ninguna norma internacional”, por lo que la República Islámica no se quedará de brazos cruzados esperando a que las leyes internacionales detengan la beligerancia israelí, y actuará por su propia cuenta.
“No confiamos en las leyes internacionales, las cumplimos por nuestra cuenta y no creemos que estas leyes puedan detener a Israel. Para defendernos a nosotros mismos y a nuestras instalaciones nucleares, tenemos nuestras propias herramientas y métodos, y nos basamos en ellos”, remarca.
Irán no quiere una guerra, pero está preparado
Ha enfatizado que la República Islámica de Irán no busca la guerra en la región, aunque está “preparada para ello”. “Hemos hecho todo lo posible para desescalar las tensiones, pero también tenemos la preparación y la capacidad para enfrentar cualquier escenario”, afirma.
Sobre un eventual apoyo de los países de la zona a una posible acción militar israelí contra Irán, Araqchi ha señalado que todos los países vecinos han asegurado que no permitirán que su suelo se utilice como una plataforma para lanzar ataques contra la República Islámica de Irán.
Irán observa de cerca movimientos de bases estadounidenses en la zona
El jefe de la Diplomacia persa ha denunciado el apoyo incondicional de Estados Unidos y algunos países europeos a los crímenes de Israel en la región, y ha advertido que Irán observa “de cerca los movimientos de las bases estadounidenses y vigila todos sus desplazamientos y vuelos” para impedir cualquier acto provocativo contra el país persa o sus intereses en la región.
El 1 de octubre, Irán lanzó 180 misiles balísticos hacia las bases militares y de inteligencia del régimen de Israel en respuesta al asesinato del líder político del movimiento palestino HAMAS, Ismail Haniya; el líder del movimiento libanés Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá, y el alto comandante iraní, Abás Nilforushan.
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